martes, 27 de marzo de 2007

Me sobran los motivos....


Tristes guerras
si no es amor la empresa.

Tristes, tristes.

Tristes armas
si no son las palabras.
Tristes, tristes.
Tristes hombres
si no mueren de amores.
Tristes, tristes.



A todos nos ha pasado alguna vez. Todos, más temprano que tarde, agarramos una pelotera considerable con nuestros padres y discutimos, y damos portazos o levantamos la voz, pero pocos reaccionan como ella: escribiendo estos versos en un folio y colgándolos en la pared dela cocina.

Y esto no es nada, una nimiedad, una nonada, al lado de todos los motivos (me sobran los motivos, sí) que ella esgrime y uno tiene para quererla. Por eso me voy, nos vamos, hasta Italia, a ser un poco partícipes de esa fugacidad feliz que ella está viviendo, a compartir con ella todo lo bonito de su vida. A parte, claro está, de las ganas de abrazarla y tomar con ella un kalimotxo. El jueves in the morning estaremos en Venezia, a un tren de distancia de Padova. Quise decir: Adriana.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Jo ... que penita. Espero que me deis señales de vida eee. La echo taaaanto de menos. Darle un megabesu de mi parte y beberos un mochuelo por mi ... sniff sniff.

Besinos y buen viaje:)